Así de tajante es Shai Agassi, fundador y jefe ejecutivo de Better Place. Esta empresa es conocida por ser pionera en llevar a la palestra a nivel mundial la posibilidad de crear electrolineras en las que en vez de recargar la batería, la intercambiamos por una ya cargada previamente, reduciendo el tiempo de recarga a una sencilla operación de menos de 5 minutos, eliminando el problema de la autonomía que surgía sobre todo para recorrer largos trayectos.
En una entrevista del pasado mes de diciembre, Shai Agassi ponía de manifiesto que el coche eléctrico tiene que superar la barrera mayor de todas, el escepticismo del gran público y no las tecnológicas como muchos opinan.
«Estamos luchando contra nuestras ideas preconcebidas» dice Agassi. Opina que estamos ante el mayor cambio en la industria automovilística de los últimos 100 años. Al igual que en su día, el Ford Model T, cambio nuestras costumbres, forma de construir los coches, como venderlos y que ofrecian al cliente, hoy en día nos enfrentamos a uno similar. Pero ahora se redefinen las fronteras con un salto aún mayor, en la forma de construir el coche, usarlo y el precio a fijar.