Las carrocerias familiares tienen mucho peso en algunos países, no tanto por ejemplo en España. La apuesta de Volvo pone encima de la mesa un turismo familiar híbrido, que combina un motor eléctrico con uno de gasóleo (es decir Diésel). El bloque Diesel tiene una cilindrada de 2,5 litros y produce 215 CV y 440 Nm, combinado con uno eléctrico de 70 CV y par constante de 200 Nm. Al funcionar ambos a la vez, en distintos ejes genera la sensación de estar ante un tracción a las cuatro ruedas.
En el modo eléctrico, puede circular hasta 50 Km sin consumir un solo litro de gasolina. Además al contar con enchufe nos podemos autoabastecer desde casa. No estamos por tanto ante un híbrido de rango extendido, sino que es un híbrido enchufable con una capacidad de baterías importante y bien refrigerada (usa el sistema heredado del Ford Focus). En ciclo combinado el dato es increíble, ya que según afirma la marca sueca, el consumo se queda en 1,9 litros por cada 100 Km y con unas emisiones de CO2 de 49 g/Km. Después del salto más imágenes